Al menos 4 muertos y 2 desaparecidos por las fuertes lluvias en el sureste de China
Al menos cuatro personas perdieron la vida y dos permanecen desaparecidas como consecuencia de las fuertes lluvias registradas en los últimos días en la provincia suroriental china de Fujian.
Este domingo, algunos puntos de la localidad de Yanqian sufrieron «precipitaciones extremas», de hasta 372,4 milímetros en 24 horas, lo que provocó la activación de la alerta de nivel 1 contra inundaciones, informó este lunes la cadena estatal CCTV.
Un total de 17 localidades de la zona más afectada han sufrido daños considerables: un total de 47.800 personas se han visto damnificadas por el desastre, con 378 viviendas derrumbadas y 880 hectáreas de cultivos dañados.
Además, se reportaron daños en 135 tramos de carreteras, sumando 73,3 kilómetros, y en 158 secciones de diques y presas, recogió la cadena.
Las pérdidas económicas directas por daños en infraestructuras alcanzan los 415 millones de yuanes (57,2 millones de dólares, 53,4 millones de euros).
El Centro Meteorológico Nacional del gigante asiático activó este lunes la alerta naranja, la segunda en nivel dentro del sistema de advertencia meteorológica, por lluvias torrenciales e intensas tormentas para algunas áreas del centro-sur del río Yangtsé, Jiangxi (centro), Sichuan (centro), Guizhou (centro), Hunan (centro), Yunnan (sur), Guangxi (sur), Fujian y Zhejiang (este), donde se esperan precipitaciones de hasta 270 milímetros entre hoy y mañana.
Con la influencia de fenómenos como El Niño, se prevé que China experimente tanto inundaciones como sequías entre junio y agosto de este año, período en el que los principales ríos del país sufrirán diversos grados de inundación durante ese periodo, informó recientemente el Ministerio de Recursos Hídricos de China.
En los últimos veranos, los eventos climáticos extremos han causado estragos en el gigante asiático: los meses estivales de 2023 estuvieron marcados por inundaciones en Pekín que dejaron más de 30 muertos, mientras que, en 2022 diversas olas de calor extremo y sequías azotaron el centro y el este del país.
En julio de 2021, precipitaciones de una intensidad inédita en décadas dejaron casi 400 muertos en la provincia central de Henan, que el Ejecutivo chino achacó a una «falta de preparación y de percepción de riesgo» por parte de las autoridades locales.