Aplazan audiencia de medida de coerción por alijo de 9.8 toneladas de droga
La audiencia de medida de coerción contra los siete presuntos implicados en la llamada operación Panthera 7, sobre la incautación en diciembre pasado de 9.8 toneladas de cocaína en Puerto Caucedo, fue aplazada de nuevo este jueves hasta el 24 de enero, a fin de que los abogados puedan abordar las defensas con sus clientes.
La Fiscalía, que había solicitado esta audiencia de medidas provisionales, no se opuso al aplazamiento porque, según dijo a los medios el procurador fiscal Milciades Guzmán, «no se trata de oponerse o de discutir por discutir en un tribunal, se trata de que el debido proceso se observe en todo momento y que el pedimento del Ministerio Público sea acogido porque está bien sustentado».
Los imputados contra los que el Ministerio Público solicita 18 meses de prisión preventiva han sido identificados como Enriquillo Luis Brito, director del distrito municipal de Bayahibe, y su hijo Enrique José Luis Brito, así como José Nicolás Castillo Hart (alias Nikito), Winston Armando Tejera Rodríguez (Barbikin), Cristian Rayner Canela Aybar, Nelson Neftalí Mercedes Lugo y Dulvi Jesús De los Santos.
Una octava persona está detenida tras entregarse a la justicia de manera voluntaria, pero sobre ella, indicó Guzmán, todavía no se ha decidido si se presentará o no solicitud de medidas.
Además, hay «tres o cuatro» prófugos en el marco de esta operación Panthera 7, agregó.
Los siete imputados identificados son señalados por el Ministerio Público como miembros de una red internacional de narcotráfico y lavado de activos desmantelada en una operación conjunta de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y la agencia antinarcóticos de Estados Unidos, la DEA.
Según la solicitud de coerción, durante los allanamientos a la red fueron incautados más de 22 millones en efectivo, en dólares y pesos, además de 20 vehículos livianos y 10 pesados, 10 contenedores, tres motocicletas, tres pasolas, cinco motores fuera de borda y armas de fuego.
La investigación fiscal concluyó que las 9.8 toneladas de drogas incautadas, un récord en República Dominicana y en parte del Caribe, llegó desde Colombia varios meses antes de su decomiso.
El cargamento fue ocupado en el Puerto Multimodal de Caucedo y, conforme a la investigación, la red a la que se le atribuye la propiedad «captó varios empleados» de la terminal, que contribuyeron a la entrada del cargamento a la misma a bordo de un contenedor, de acuerdo con un comunicado del Ministerio Público.
Asimismo, que la organización criminal opera las empresas Grasswey Group SRL y GWG Transport, de transporte de contenedores, las cuales utilizaban para el tráfico internacional de drogas, añadió la nota.
Ya en el puerto, trataron de introducir el cargamento en un contenedor cargado de bananos que llegó a la terminal procedente de Guatemala y que tenía como destino Bélgica, pero la operación fue descubierta por el Ministerio Público y la DNCD, el cual había sido alertado sobre el alijo.