Condenan a cuatro policías por la muerte de la pareja de evangélicos
El Tribunal Colegiado de Villa Altagracia condenó este viernes a cuatro policías por la muerte de los esposos Elisa Muñoz Marte, de 32 años, y Joel Eusebio Díaz Ferrer, de 35, atacados a tiros cuando se desplazaban en un automóvil por la autopista Duarte en marzo de 2021.
El coronel César Maríñez Lora y el raso Guillermo Rosario Melo fueron sentenciados a 20 años de prisión, mientras que el segundo teniente Victorino Reyes Navarro y el cabo Ángel de los Santos deberán cumplir 8 años de cárcel por el caso, que consternó a la población nacional y fue condenado por el presidente Luis Abinader.
Los otros policías implicados en el caso -Emil Alexander Rincón Martes, Domingo Perdomo Reyes, Juan Samuel Ogando Solís y Anthony Castro Pérez- fueron declarados no culpables.
El matrimonio falleció bajo fuego de los agentes cuando la noche del 30 de marzo de 2021 las víctimas se trasladaban a bordo de un vehículo a la altura del kilómetro 45 de la Autopista Duarte, tras participar en un evento religioso en el paraje Los Ganchos, del municipio Villa Altagracia, según el Ministerio Público.
Esa noche, el acusado Maríñez Lora, luego de escuchar en la radio de la Policía que los ocupantes de un carro de similares características al de las víctimas habían cometido varios atracos en el municipio Bonao y que se dirigían a Santo Domingo, acudió al kilómetro 45 de la citada vía.
Lo acompañaban Reyes Navarro, De los Santos, Rosario Melo, que esa noche no estaba de servicio, y Rincón Martes y, minutos después llegaron al lugar dos unidades motorizadas compuestas por Perdomo Reyes, Solís y Castro Pérez, de acuerdo con la acusación.
El órgano acusador sostiene que los procesados improvisaron un retén y obstaculizaron la vía a los fines de detener los vehículos que se desplazaban en sentido norte-sur.
En esas circunstancias, al notar la llegada del vehículo color blanco de los esposos, realizaron varias ráfagas de disparos con armas de distintos calibres y desde distintas direcciones, sin que mediara una requisa previa del automóvil y de sus ocupantes.
